Desecho

Amor mío, te desecho

Quiero estar amor mío

cerca de ti  besándote todo el día,

contando versiones distintas sobre el día,

remolcándonos a la cama para coger al final del día.

Estás errante  al paso de horas,

ya ni siquiera sabes quien eres.

Te ocultas bajo el manto de algunas noches  

con la realidad trabada,

como mensajes atrapados en botellas.

Sembramos sueños juntos

 como hacen los amantes

para tenernos, para amarnos y para obtenernos

Estamos cansados

tumbados al borde de encuentros pasajeros

Quiero estar contigo, amor mío

pero estas tan frío y me tienes tanto asco

que deseas desmembrarme, enterrarme,

y escupirme

porque lo se ahora

soy retrato de un mal rato

Estos últimos días

Estuve despierta en la madrugada

esperando la mañana.

Tengo varias confesiones que hacerte:

Hay en mi una grieta permanente

que me ha hecho escribir los peores poemas

estos últimos días.

No son poemas de amor, ni son de olvido

mucho menos son sobre ti.

He perdido el valor para escribir,

los insomnios, los amantes y las borracheras

han dejado de ser lo suficientemente atractivos

para hacerme escribir en las servilletas

de los bares.

Echo de menos la audacia para hablar de ti;

de lo que me dueles con tus caricias que

me humillan

Ahora que mi corazón se ha vuelto solitario

está temblando;

El miedo me ha exiliado de la inspiración

como abandonada en un llano bajo el sol

He dejado de tejer las palabras;

Pues ahora entiendo como es

haber sido amputada de las manos. 

Acabó

Amor, un índice (fragmento)
Por Rebecca Lindenberg


ACABÓ, cuando contesté el teléfono
aquella mañana de mayo y el hombre del equipo de rescate
dijo “Se acabó”.