Se han ido formando figuras de arena por un cuarto de siglo
Me ha crecido hierba de los ojos ,
creciendo hasta las grietas de mis labios
que están esperando el monzón de verano
porque la tierra de donde vengo es impredecible;
acuna la vida y la muerte entre sierras
que parecen fantasmas por la noche
batiéndose de colores azules y grises.
Está tierra me regalo piernas fuertes
para correr de mi propia crucifixión
caderas anchas para dar luz a zorros
que navegaran entre las dunas de tiempo en tiempo
transfigurándose en fuego
para alumbrar las cuevas en mis entrañas
Mi padre habitó esta tierra también
prefirió el mar a las tolvaneras
fue a ahogarse y a partirse de tanta sal
y a mi ,volcánica, me dejó en la arena
mi madre de piernas delgadas y pechos grandes
fuente de vida y de divinidad
piel delicada digna de ser contemplada por la luna
por las estrellas que son los ojos del cielo
medio habita el desierto y medio habita el mar
Yo vivo mi tierra
aquí mis pies se hunden en las fosas
heredadas por mi linaje
Me resuelvo a mi misma bajo el sol abrazador
encaminada a parir el sentido que santifique
la razón de coexistir con esta versión árida
de la vida misma